Disfruta de un San Valentín de ensueño sintiéndote protagonista de un cuento digno de las mágicas historias de Las mil y una noches en una ciudad que aún conserva el embrujo que le confirieron los reyes nazaríes hace ya más de seis siglos.
Granada cautiva al visitante con esa mezcla casi irreal de sus maravillosos palacios de la Alhambra, los jardines del Generalife, barrios tan encantadores como el Albaicín, la amabilidad de sus gentes y el sabor de su gastronomía, todo ello, por si fuera poco, realzado por ese escenario natural tan hermoso que se produce de una forma casi mística cuando el verde de la vegetación y el ocre anaranjado de los edificios de la ciudad andalusí contrastan con el azul del cielo y el blanco de la nieve en las cumbres de Sierra Nevada cualquier soleado día de invierno. La ciudad está dotada de algunos hoteles que reúnen todo el confort, calidad e historia que nos permitirá gozar plenamente una escapada romántica en la antigua capital del Reino de Granada.
PARADOR DE GRANADA Este hotel goza de una ubicación privilegiada dentro del propio recinto de la Alhambra, ya que ocupa el edificio de lo que en su día fue el convento de San Francisco, del siglo XV. Combina elementos originales como arcos de piedra, techos con vigas a la vista y muebles antiguos con una decoración elegante y contemporánea. En su restaurante, se puede disfrutar de una amplia variedad de platos tradicionales andaluces y, desde su terraza, se contemplan los jardines de la Alhambra. Además, cuenta con un elegante patio interior cerrado en el que pasar un rato apacible mientras se disfruta de unas bebidas. Está a solo diez minutos a pie del casco antiguo y la catedral de Granada.
CASA DEL CAPITEL NAZARÍ El edificio en el que se halla este hotel es un palacio del siglo XVI situado en el barrio árabe medieval del Albaicín, justo al lado de la plaza Nueva, muy cerca del Darro y del centro de Granada. Paseando, sólo se necesitan cinco minutos para llegar a la catedral y unos veinte hasta la Alhambra. Cuenta con un vistoso y muy bien decorado patio andaluz y sus habitaciones de techos artesonados y suelos de baldosas mantienen reminiscencias del antiguo palacio. Las calles de los alrededores del barrio en el que se ubica están repletas de restaurantes y bares.
PALACIO DE SANTA INÉS Situado también en el barrio del Albaicín, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, este hotel está formado por la unión de dos edificios mudéjares. En su precioso salón, puede admirarse el techo auténtico de estilo mudéjar que alberga, construido en 1512. La decoración del patio interior es exquisita y cuenta con una fuente, azulejos ornamentados y frescos originales renacentistas. Desde su terraza se disfruta de vistas panorámicas de la Alhambra, situada a solo veinte minutos andando. De igual modo, desde las habitaciones superiores se goza de una bella perspectiva sobre el hermoso complejo nazarí de la Alhambra.
SHINE ALBAYZÍN Es un hotel de diseño situado en un palacio del siglo XVI en la carrera del Darro. Sus habitaciones están situadas en torno a un típico patio granadino que ha sido transformado en un atractivo salón en el que, por las tardes, se puede tomar de manera gratuita té y tarta. Desde las habitaciones de los pisos superiores se tienen vistas de la Alhambra y el río Darro. La plaza nueva está a unos 50 metros del hotel y la catedral a tan sólo cinco minutos a pie.
ALHAMBRA PALACE Si hablamos de glamur en Granada, es imprescindible hacer referencia al Alhambra Palace Hotel. Con 126 junior suites y habitaciones dobles de charm único y con espectaculares vistas desde su terraza, el hotel concede a sus invitados el honor de vivir la experiencia de la Alhambra en primera persona.
A cinco minutos a pie de los palacios y jardines nazaríes, y dentro de la propia ciudadela, el hotel integra el estilo decorativo del monumento cultural que le da nombre, creando una suntuosa atmósfera árabe que hace de la estancia una visita inolvidable, acompañada de la alegre acogida del personal del hotel, atentos al más mínimo detalle. Para acabar la jornada de turismo, nada como relajarse en la terraza o los miradores, embelesarse al ver caer la noche en Sierra Nevada, tomar un cóctel en el bar del hotel y deleitarse ante la inminente llegada de la perfecta muestra de la gastronomía andaluza del restaurante.
La historia del hotel, sinónimo intemporal de buen gusto, la cuentan voces ilustres del siglo XX. Empieza en 1910 de la mano del duque de San Pedro de Galatino, quien, viendo el potencial del entorno y su inminente expansión, ubicó el hotel en un punto elevado de la ciudad, vistas privilegiadas incluidas. Ese mismo año, el rey Alfonso XIII inauguró el hotel. Pronto se convirtió en un referente de la hostelería en nuestro país. Además, las atractivas diversiones que ofrecía el mítico hotel de lujo no eran pocas: teatro, cinematógrafo, salones para celebraciones y salones de juegos significaban un flujo constante de personalidades de la época. Por ello, no sorprende que la suntuosa posada viviera el renacer cultural en la ciudad antes de la guerra. Víctor Fernández, escritor y periodista, cuenta que “los salones del exquisito hotel acogieron a algunos de los más ilustres invitados del Concurso de Cante Jondo que en 1922 organizaron Manuel de Falla y Federico García Lorca”. Muchos nombres celebres se dejaron caer, como Ignacio Zuloaga, Santiago Rusiñol o Ramón Gómez de la Serna.
Pero ahí no acaba la cosa, y es que un siglo da mucho de sí. Durante la Guerra Civil, el mágico lugar se convirtió en un hospital de sangre para atender a los heridos en la contienda, lo que marcó uno de los periodos más tristes de la historia del hotel. Tras el combate, la paz volvió a reinar en la última ciudad de Al-Andalus, el Alhambra Palace Hotel recobró la normalidad y volvió a ser el alojamiento preferido de figuras clave del siglo XX. Las estrellas de cine más destacadas de todas las épocas también se enamoraron del opulento hotel, que alojó a actores de la talla de Burt Lancaster, Lauren Bacall, Vivien Leigh, Charlton Heston u Orson Welles, todos ellos barómetros universales de elegancia. Más tarde, otros famosos intérpretes se unieron al elenco, como Marcello Mastroianni, Faye Dunaway o Brad Pitt entre otros, siguiendo la estela del Hollywood clásico. Otros huéspedes decisivos en política, literatura y arte han sido Rafael Alberti, Mario Vargas Llosa y Charles de Gaulle, entre otros. Tras más de ciento seis años de continuada excelencia, está claro que la cultura, el estilo y el glamur de Granada tienen nombre y apellido: Alhambra Palace Hotel.
Credits: adaptación de un par de artículos publicados en 2013 en www.hola.com/viajes
Photos: Anna Tomàs y Xavi Larrull
